Seguro que has oído hablar muchas veces del nexo causal pero, ¿sabrías decir qué es? Muchas veces las explicaciones están repletas de tecnicismos que son complicados de entender. El nexo causal es un elemento básico de la responsabilidad civil y, por lo tanto, algo con lo que debemos estar familiarizados.
El nexo causal es una relación causa-efecto que existe entre la acción determinante de un daño y lo que es el daño en sí. Por ejemplo, en un accidente de coche, si por el mal estado de la carretera nos salimos de la vía, el nexo causal es la relación entre el mal estado de la carretera y la salida de la vía.
Es posible que ese nexo de causalidad se rompa si interviene algún nuevo echo que modifica el curso natural de las cosas y muchas veces las aseguradoras utilizan este recurso para negar las indemnizaciones.
Interrupción del nexo causal
El nexo causal puede ser interrumpido por varios supuestos:
- Casos de culpa de la víctima
- Concurrencia de culpas
- Culpa de un tercero
- Fuerza mayor
Por ejemplo, si en un accidente no acudimos al médico al instante y después tenemos dolores cervicales, a la hora de hacer una reclamación al seguro, las aseguradoras piden alegar que la causa de ese dolor no es el accidente.
Es por eso que se necesita un abogado y un perito que determine las circunstancias y causas de un accidente para que las víctimas de un accidente tengan la indemnización que les corresponde.